Otra noche de eliminación Copera

Racing cayó ante Corinthians en la fase inicial de Copa Sudamericana, por penales. Cristaldo había adelantado a la academia y Vágner Love igualó para el Timao.


Era noche de Copas, con el envión anímico de la victoria clásica y la decisión (tomada de antemano), de reservar a casi todos los habituales titulares, para la definición de la Superliga.

Del otro lado, Corinthians llegaba con lo mejor y una buena racha de juegos ganados en fila, tras el empate en la ida en San Pablo. Sabiendo que necesitaba marcar al menos un tanto, como para forzar la llave y no darle valor doble al tanto de Andrés Ríos. 

A tal punto que se especuló hasta último momento con que el Timao saliera al campo con dos puntas definidos, cosa que habitualmente no hace en los torneos locales. Sin embargo, de movida el visitante apostó por la cautela, pensó en un partido mas "largo" y le trasladó la responsabilidad a Racing, cediendo espacio y balón.

No lo hizo mal el equipo de Coudet (teniendo en cuenta las ausencias de peso), y tuvo el control del juego casi de manera exclusiva en el arranque, de hecho recién a los 32 minutos, Corinthians remato su primer disparo desviado por intermedio de su goleador Gustavo. En ese lapso, Julián López y Neri Cardozo se hicieron ejes de la salida, con Soto y Pillud definitivamente como laterales en ataque. Desde ahí, Racing manejaba el trámite, pero sin profundidad, ni claridad en los metros finales. Ni Ojeda por izquierda ni Solari por derecha rompían en el mano a mano, y entonces Cassio y Arias eran espectadores privilegiados.

Parecía que se iba la primera mitad en cero, hasta que Cardozo (de buenos 45 iniciales) buscó a Cristaldo, que en un buen movimiento aprovecho la pasividad del grandote Manoel, para meter frentazo de pique al piso y adelantar a la academia. En el cierre quedó espacio para que Arias (una vez más el destacado), le ahogara el empate a Sornoza, con una magnifica volada, a la salida de un tiro libre bien ejecutado por el ecuatoriano.

Con el marcador abajo, era de esperar que Carille modificase la estructura y fuera por la segunda parte del plan: buscar algo más en ofensiva. De entrada apostó por la experiencia de Vágner Lover, para acompañar a un solitario Gustavo, que no pesó en la primera mitad. Adelantó líneas Corinthians también, ya no fue pasivo a la hora de la pelea en media cancha y Racing entró en el terreno de las impresiciones en el manejo criterioso del balón que había mostrado hasta ahí.

Tuvo rápida recompensa la apuesta de Fábio, a los 6 del complemento, Vágner Love se encontró en segunda jugada con una pelota pérdida, aprovechó el quedo grande de Juli Lopez habilitando a todos casi en la línea de meta y fusiló a Arias.
Sintió el golpe el local, y unos minutos después, el que ganó el duelo mano a mano entre los mismos protagonistas, fue el arquero académico. Tal vez el momento del partido, pedía frescura para la zona media y que Zaracho saltará al campo para darle alimento a Cristaldo y Cvitanich (había reemplazado a un estático Ríos). Coudet lo vió distinto, y apostó por Fernández para recuperar la tenencia, y dió la impresión de que solo sirvió para ver superpuestos a sus volantes internos, con mucho pase lateral, pero sin gestionar nada vertical para ir por Cassio.

Pudo ser derrota, cuando Gustavo ganó en las alturas y Domínguez llegó a salvar en la línea. También pudo ser victoria con la de Zaracho (ingresó muy tarde, en lugar de Cardozo), pero el negrito le pego muy mal. No hubo tiempo para más, la historia se definía por penales.

Sin los habituales "especialistas" en cancha (con el juego cerrado, ¿no pudo pensarse en Lisandro o Donatti para la serie desde los 12 pasos?), Racing falló en los pies de Domínguez, Cristaldo y Solari, y el Timao se impusó por 5 a 4.

Final de una nueva (y corta), aventura internacional para Racing, que sigue sin poder trascender en ese plano, jugando ambos partidos de la serie con equipo alternativo. Prontamente habrá que enfocarse en la Superliga para alcanzar el objetivo, pero no deja de ser una derrota temprana, ante un rival accesible y con la posibilidad de cerrar el pase a la 2° fase de local, todas ventajas que Racing no aprovechó, demostrando escaso interés por una copa que, paradójicamente, no luce en sus vitrinas.

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